En muchos casos el proceso de contratar a una agencia para el diseño de tu emblema comercial (lo que tú llamas logotipo), se convierte en una disputa en la que el cliente alega que el diseñador debe complacerle personalmente, mientras que el diseñador alega que "no siempre lo que al cliente le gusta, es lo que le conviene".
Pensando en el emprendedor, hemos recopilado algunos consejos o buenas prácticas al momento de gerenciar la generación de la identidad visual de tu emprendimiento.
Es muy común mantener concepciones erradas sobre la naturaleza de las insignias comerciales, el mismo hecho de llamar "logotipo" a las insignias ya es algo en lo que todos nos hemos equivocado; pero ¡hasta aquí! Llegó la hora de comprender a fondo cómo es todo este tema y de verdad entender cuál es el papel que juega en todo tu proceso de mercadeo.
No tengas miedo de que tu empresa va a dejar de percibir ganancias porque el logotipo no informe directamente lo que tu empresa hace, no le insistas a tu diseñador en que diseñe un logotipo que EXPLIQUE lo que su empresa hace.
Definitivamente tú no estás por contratar la producción de una prenda de uso personal como una joya o una camisa, tú necesitas un emblema que identifique tu emprendimiento en un mercado que tiene unas características particulares y muy complejas.
Conoce los tipos de insignia que existen. Conoce por qué no siempre la palabra "logotipo" es correcta para hablar de ello, puedes empaparte sobre qué tipos de insignias existen, qué tendencias hay y elegir una de ellas, así te podrás comunicar mejor con el profesional a cargo de la tarea, evitando malos entendidos.
Conocer y determinar el tipo de tendencia o estilo que se desea te ayudará a ganar mucho terreno en cuanto a definir una identidad visual cónsona con la actualidad y fácilmente digerible por los consumidores o clientes.
Lee más sobre los tipos de insignias comerciales que existen
Muchos clientes desean imponernos colores por su significado místico: "Usa el color dorado porque llama al dinero", o "... el color añil porque es el color de la prosperidad", o mejor aún: "¡mézclalos!". Comprendemos que en profundo compromiso con su empresa, el cliente tiene deseos de transmitir efectos beneficiosos de las prácticas o creencias metafísicas mediante el uso de simbologías y colores.
El problema con estas prácticas es sencillo: más importante que el efecto místico que puedan surtir sobre la suerte de tu empresa es el efecto directo que tienen sobre el público. Independientemente de las creencias hacer una elección de colores basada en la religión o creencias místicas, sin ningún tipo de concordancia con algún criterio comunicacional del diseño, puede tener resultados poco deseables.
Es sano mencionar que no siempre tu público va a compartir las mismas creencias y simbologías que tú, así que estarás fallando en el aspecto más importante de tu imagen corporativa: la ¡comunicación! Estarás comunicando sensaciones, conceptos y expectativas erróneos si lo haces ante un público que no comparte los mismos códigos que tú.
¡Alégrate!, tu logotipo NO tiene que llevar ni el SAS, ni el C.A. ni el SRL, ni el RIF. En algunos países existe la normativa de que ciertos datos estén presentes en el diseño de las piezas de marketing (como en Venezuela, el RIF), pero NO son parte del logo, ni deben estar cerca del mismo; por favor, no hagas el proceso de diseño más dificil obligando a tu diseñador a incluir estas siglas que carecen de valor de marketing.
Comprendemos lo costoso que puede ser un re branding; podrías comprender lo muy poco conveniente que es para una agencia el detener un proyecto por plantear la necesidad de que tú actualices, optimices o replantees tu logotipo, es por eso que cuando un profesional te sugiera enfáticamente hacerlo es porque es necesario. Quizás estás perdiendo más no actualizándote que lo que podrías invertir en un refrescamiento de imagen.
Deja detrás los miedos como "La gente ya no me va a reconocer y por eso no me va a comprar". Nunca nadie jamás ha dejado de confiar en una marca por modernizar, optimizar y actualizar su vieja imagen corporativa, sobre todo si la anterior está evidentemente realizada por personas no profesionales.
Si tú has hecho un buen trabajo eligiendo a un diseñador profesional entonces haz valer tu dinero: confía en él (ella). Tu diseñador es un experto en plasmar gráficamente los elementos emocionales necesarios para transmitir lo que tu logotipo necesita transmitir, llevarle la contraria a tu diseñador es una de las formas más comunes de perder tu inversión y tener como resultado un trabajo no adecuado.
Comprendemos que estés íntima y personalmente relacionado con tu emprendimiento y sientas que tu logotipo debe gustarte a ti antes que nada, sin embargo, conocemos de incontables casos en los que entramos en disputas o argumentos de diseño con los clientes en los cuales éstos se convierten en directores creativos y nos solicitan modificaciones, omisiones y permutaciones que lo único que hacen es perjudicar el resultado del trabajo.
Comprendemos tu necesidad de estar 100% identificado con tu logotipo, pero te recomendamos recordar que tú estás contratando profesionales de la comunicación gráfica, como Movidagrafica, para hacer un trabajo acerca del cual tú no tienes experticia. No confundas tus gustos con la habilidad para hacer una pieza gráfica exitosa y funcional, no cometas el error de dar consejos de diseño sin saber de diseño.
Tu diseñador no está creando una prenda personal o una insignia personal para ti, sino una pieza publicitaria que debe ser funcional y eficiente en una estrategia de mercadeo. Te invitamos a CONFIAR en nosotros porque somos expertos.